Echo de menos esas conversaciones en las que la discusión más larga eran de quién quería más a quién. Los tiempos en los que el único miedo era que se desconocectase y no poder hablar más.
Las tardes de pipas en cualquier banco. Poner nuestra fecha en cualquier sitio. Decirle que le quieres cuando lo sientes, sin miedo a que nadie te diga nada. Pero ahora, todo eso a cambiado. Confunden el amor con las demás cosas. Los calentones a mitad de la tarde, son rutina. Ahora la conversación más larga suele ser ''en tu casa o en la mía'' Si eso os llena, vale. Pero eso no es para mi, porque cuando yo digo te quiero, lo digo en serio y con todas las consecuencias que conlleva decirlo.
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